Según la Secretaria del Tesoro de EE.UU., Janet Yellen, es necesario incrementar el límite de la deuda de EE.UU., debido a que una curva de tipos invertida, la subida del oro, la caída del comercio internacional y el aumento de los tipos de interés han puesto a la economía más grande del mundo al borde de una recesión, que tendría consecuencias internas (no pago a la administración pública) y universales (devaluación del dólar). Las economías dolarizadas podrían correr la suerte de la economía principal.
Históricamente, el precio del oro ha crecido cuando el dólar ha sido más débil. Si hacemos un análisis histórico del precio del oro, encontramos que el 2006 la Onza Troy tuvo un precio aproximado de US$ 600 y se duplicó para el 2010, llegando a US$ 1,236; desde entonces, a la fecha, prácticamente ha vuelto a duplicar su valor, llegando a un promedio de US$ 2,000 en lo que va de mayo.
Las reservas internacionales netas (RIN) son recursos en oro y monedas distintas al nuevo sol, con los que cuenta el Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) para, principalmente, respaldar la confianza en el nuevo sol.
El comercio exige una rápida movilización de capitales, la misma que por su dinamismo podría tener efectos negativos en nuestra economía, si no se cuenta con los recursos necesarios. Por eso, a menudo, el nivel adecuado de reservas que un país debe mantener se mide en función de su cobertura de importaciones o de deuda externa (mínimo 3 meses de importaciones).
En el caso del Perú, es uno de los países con menor deuda externa y, según el BCRP, las RIN, al 3 de mayo de 2023, fueron de US$ 74,897 millones, equivalente al 30% del PBI, siendo uno de los porcentajes más altos entre las economías emergentes.
La estructura de las inversiones internacionales del BCRP al cierre de marzo fue del 80% colocada en valores (mayoritariamente bonos del tesoro de EE.UU.), del 17% en depósitos y sólo del 3% en oro, a pesar de que el Perú es el octavo productor de oro en el mundo, por lo que podría comenzar adquiriendo hasta un 10% de sus reservas en oro, lo que equivaldría a US$ 6,000 millones, sin que peligren sus transacciones. La adquisición del oro podría darse adquiriendo oro artesanal, sujeto al proceso de formalización en marcha, lo que elevaría los ingresos fiscales que se encuentran estancados, y al mismo tiempo se profundiza la campaña contra el oro ilegal.
Perú es un país con una economía abierta. La dolarización financiera amplifica los efectos de las fluctuaciones en los flujos de capital, y la intervención en el mercado cambiario puede reducir la volatilidad macroeconómica. Esto muestra la importancia del uso de las reservas internacionales para aislar la economía del ciclo financiero global.
Las RIN sirven para reducir la volatilidad del dólar, con la intervención en el mercado cambiario, siendo así que, en los últimos años, frente a una volatilidad como la incertidumbre política tras las elecciones de 2021, el fortalecimiento internacional del dólar ante la incertidumbre provocada por el conflicto Rusia – Ucrania, y las expectativas de alzas de tasas de interés por la mayor inflación global en el 2022; el dólar promedió S/3.90 en el 2021; descendió a S/ 3.84 en el 2022; y las expectativas de tipo de cambio para fines del 2023 se ubican entre S/ 3.80 y S/ 3.82 por dólar según el BCRP, aunque hoy se encuentra en S/ 3.69.
En nuestro artículo “Reservas de oro del país y la volatilidad del dólar”, publicado en esta columna el 22 de mayo de 2022, expresamos que existía una menor influencia de los petrodólares en la compra de hidrocarburos a nivel mundial, lo que debilita al dólar, consecuencia de que Rusia y China ahora solo compran y venden petróleo con su propia moneda; en el caso del yuan, convertible a oro, en circunstancias de que China es el primer productor de oro en el mundo. Esta nueva demanda, favorece a la revalorización del oro. De ahí que la reciente adquisición de bonos del tesoro de EE.UU. por parte del BCRP podría resultar inconveniente.
Por ECO. José Linares Gallo